Según la Bolsa de Cereales, el rendimiento es mayor a 35 quintales por hectárea y la cosecha final de 3,1 millones de toneladas.
Tras un período de inactividad, el mercado argentino de urea comenzó a reactivarse de la mano de la mejora de los precios de los granos –especialmente la soja– promovida por la rebaja de derechos de exportación.
Bajo las nuevas condiciones, se espera que la producción total de granos ascienda a 172,3 millones de toneladas, frente a las 159,3 millones del escenario base.
La incorporación permitirá ampliar la capacidad logística y agilizar el despacho de granos desde el centro y norte hacia los puertos del país.
De los más de 4 millones de empleos que ocupa el sector, 500 mil se dedican a la cadena de la carne vacuna, y unos 450 mil, a la de frutas y verduras, según indica un informe de la Fundación FADA.
En las encuestas de esta semana productores y técnicos se debaten entre la inversión en la tecnología para potenciar los cultivos versus la expansión en un escenario de las mejores reservas hídricas en 5 años.
Se estima que se implantarán 145.000 hectáreas con la oleaginosa, con un incremento del 5%, en comparación con la cifra del año anterior. Las lluvias, en el área noroeste del departamento 9 de Julio, donde permaneció paralizada la implantación del trigo, por la escasa a nula disponibilidad de agua útil en la cama de siembra, se reanudaría en un par de días, por los distintos aportes de las mismas.
El banco de inversión les sugirió a sus clientes aumentar la exposición a acciones argentinas, al considerar que la corrección del mercado no refleja sus “sólidos fundamentos macroeconómicos”.
La Bolsa de Comercio de Rosario estimó ese incremento en base a un modelo diseñado para evaluar cómo inciden las políticas públicas en la producción agrícola.
Se publicó en el Boletín Oficial la medida que reduce un 20 % las alícuotas a los derechos de exportación.